Código de Ética

CÓDIGO DE ÉTICA DE “APRIMIN” ASOCIACIÓN DE PROVEEDORES INDUSTRIALES DE LA MINERÍA DE CHILE

Fundada en Santiago de Chile, el 05 de febrero de 2004

Aprimin es una agrupación gremial, en la cual sus Socios son empresas que participan en la actividad de suministro de bienes y servicios a la Industria Minera, la que desarrollan en un clima de ejemplar honestidad que asegure una equitativa y armoniosa convivencia entre los diversos factores humanos que la integran. Para lograr estos fines, los miembros de Aprimin encuadrarán sus actividades dentro de las siguientes normas:

I.-         Respetar las Leyes y sus reglamentos, sin perjuicio de luchar por su derogación o reforma cuando se estimen injustas o inconvenientes.

  • Procurar que se mantenga dentro de la Industria un ambiente de cooperación, equidad y sana competencia, sin perder de vista que es la competencia limpia y legal, la que mejor asegura la supervivencia del régimen de empresas, todo eso, considerando una rentabilidad adecuada a sus accionistas, para que permita el desarrollo de las industrias y empresas de suministro de bienes y servicios a la Minería.
  • Otorgar a los proveedores consideraciones similares a las que se desea recibir de los clientes.
  • Cumplir estricta y oportunamente las obligaciones públicas y privadas relacionadas con la actividad, de manera de mantener el prestigio y buen nombre de las empresas y los Empresarios.
  • La ética es considerada un factor clave y de alta significación en las relaciones de clientes y proveedor. Se le exigirá a las empresas asociadas, a sus empleados y a los empleados de Aprimin, un comportamiento ético, de probidad, lealtad, honestidad, veracidad.  Faltar a cualquiera de estos principios básicos pone en riesgo la permanencia de esa empresa o persona en Aprimin.
  • Las empresas asociadas se comprometen a proteger el medio ambiente y velar por la salud y la seguridad de los trabajadores y de la comunidad en general.
  • Las empresas asociadas y Aprimin se comprometen a cooperar con las autoridades en el desempeño de sus legítimas funciones como parte integrante de la labor de todo empresario.