Por José Bravo, José Bravo, Gerente de Integridad y Medio Ambiente de Sodexo Chile.
Este 28 de abril se conmemora en todo el planeta el Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, lo que nos invita a reflexionar sobre la importancia del respeto al derecho que cada trabajador tiene de gozar de un medioambiente de trabajo seguro y saludable en todos los niveles.
Según cifras de la organización Internacional del Trabajo (OIT), cada año, más de 313 millones de trabajadores sufren accidentes laborales y padecen enfermedades profesionales no mortales, lo que corresponde a la triste cifra de más de 800 mil víctimas cada día. Sin duda un escenario al que las organizaciones debemos hacer frente, considerando que esto, además de ser un problema de salud, también impacta en la economía al repercutir en altos costos para los sistemas de salud, y por ende también en el PIB de los países.
Desde Sodexo consideramos fundamental que los líderes tomemos conciencia sobre la función clave que jugamos en la protección del bienestar de nuestros colaboradores, quienes representan el corazón de las organizaciones. De ahí se desprende la importancia que le hemos asignado al tema de seguridad y salud en el trabajo, considerando hoy en día todos los factores que repercuten en el tema y que van más allá de los meros riesgos físicos, químicos o ergonómicos, entre otros, sumando hoy también factores relacionados al estrés laboral y otras temáticas.
Con este objetivo, desde 2008 en Sodexo estamos implementamos un programa llamado Preaxión, orientado a mejorar las conductas de nuestros colaboradores y que nos ha permitido bajar el Índice de Accidentalidad Acumulado (IF) desde un 26,6 a sólo un 4,6 en la actualidad. Con este mismo fin, hemos avanzado en el proceso de certificación de nuestro Sistema Integrado de Gestión. En esta avanzada de seguridad estamos aplicando también protocolos psicosociales derivados de la evolución de los procesos de trabajo, los cuales nos entregan directrices para medir la existencia y magnitud de estos nuevos factores de riesgo.
No cabe duda que es fundamental hacerse cargo de la seguridad y salud de los colaboradores y colaboradoras, haciendo nuestra la obligación para todo el sector privado de resguardar un medioambiente laboral libre de riesgos.
En este contexto, consideramos fundamental la creación de una cultura de autocuidado al interior de cada organización, que abarque todas las dimensiones de riesgo a las que se ven expuestas las personas, donde todos los estamentos de la compañía estén involucrados y donde la cultura de la prevención sea una máxima prioridad. Sólo así este derecho del que hablamos, será una realidad para todos los trabajadores.